This post is also available in English, see here.
Hace dos semanas que estoy inmersa en una nueva experiencia internacional al unirme a Rochester PR Group en Londres, una de las ciudades más multiculturales del mundo.
Antes de venir, no pensaba que iba a encontrarme con tantas diferencias culturales ya que daba por hecho que tenía una idea bastante definida de la vida en el Reino Unido basándome en películas inglesas, series de televisión, libros y noticias entre otros. Pero me he dado cuenta de que no es así. Desde que estoy en el equipo, me ha llamado la atención la prensa escrita en este país.
Como cabe esperar, al trabajar en una empresa que ofrece servicios de acceso al mercado británico, los periódicos ingleses son de vital importancia y una de mis labores, es nutrirme de ellos para conocer el mercado en el que estoy trabajando actualmente. La primera cosa que me pareció curiosa es la distribución. En España si necesitas comprar un periódico te acercas al quiosco más cercano para conseguirlo, pero aquí puedes comprar diferentes publicaciones en supermercados o establecimientos de alimentación.
Por otro lado, mencionar que existen revistas gratuitas de gran calidad accesibles en cualquier punto del metro como por ejemplo Time Out, Stylist o NME. ¡Esto si que no lo ves en el metro de Madrid! Como mucho te dan una copia de la Biblia o algún cupón descuento … Aunque también es verdad que 20 minutos es el referente de la prensa en el metro Madrileño.
Me hace pensar que es mucho más fácil para la gente acceder a la información que en nuestro país, teniendo como resultado una gran variedad de lectores.
Estoy sorprendida por la cantidad de prensa escrita disponible en el Reino Unido, desde periódicos tradicionales como el Daily Telegraph hasta otros como The i, que muestra la adaptación del mercado británico a los lectores más jóvenes.
Parece ser que comparado con España, la prensa escrita británica ha logrado el éxito adaptándose al creciente apetito, sobretodo de jóvenes lectores acostumbrados a tener acceso a noticias rápidas, cortas y concisas accesibles desde cualquier lugar donde te encuentres. La verdad es que me resulta muy interesante, y ¡espero que España tome buena nota de ello para mantener la prensa escrita viva!
Otra cosa que me llamó la atención cuando comencé a analizar los periódicos en profundidad (como Agencia de Relaciones Publicas la totalidad del equipo analiza las publicaciones de un par de periódicos. Normalmente prensa sensacionalista o tabloids, y prensa seria o broadsheets) es que las empresas y marcas invierten mucho para aparecer en las páginas. En los periódicos ingleses, puedes encontrar paginas y paginas de publicidad, mientras que en España es bastante raro ver algo parecido.
Por el sondeo que he podido realizar hasta ahora, puedo decir que la prensa escrita en este país se nutre mucho más de la inversión en publicidad junto con el contenido editorial, teniendo una balanza bastante diferente a la que tenemos en España. Estos, en general están llenos de contenido tradicional y conservador (aparte de la sección cultural y de deportes) que en el Reino Unido. Teniendo un espacio más bien reducido para que las empresas se publiciten. ¡Estoy segura de que en España no te encuentras un catalogo de huevos de pascua en un periódico!
Sé que todavía solo he rascado la superficie de los medios británicos, pero iré investigando más en este y otros aspectos relacionados con mi trabajo y las diferencias culturales entre mi país y el país que me ha acogido.
De Yara